Donald Zolan, pintor norteamericano,
expresa en sus propias palabras,
su amor hacia los niños:
“Me gustan los niños pequeños,
la forma en que sus ojos se
encienden con entusiasmo,
revelando su despertar al
mundo que los rodea.
Es una maravillosa etapa de la vida,
llena de asombro. Cada momento de
un nuevo descubrimiento es
otro momento mágico.”
Su trabajo celebra la alegría de la niñez,
con
todas sus maravillas,
inocencia y amor. Las frases a
continuación inspiran su trabajo
o vice-versa.
El mejor olor, el del pan; el mejor sabor,
el de la sal; el mejor amor, el de los
niños Hagamos que el niño que fuimos,
se sienta orgulloso de lo que
somos en la actualidad.
La mejor manera de hacer buenos
a los niños, es hacerlos felices.
Lo que se les dé a los niños, los
niños darán a la sociedad.
Educa a los niños y no será
necesario castigar a los hombres.
Los niños han de tener mucha
tolerancia con los adultos.
Lo maravilloso de la infancia es que
cualquier cosa en ella es maravillosa.
Somos lo que fue nuestra niñez.
Da un poco de amor a un niño
y ganarás un corazón.
Los niños y el genio tienen en común
el mismo órgano motor: la curiosidad.
Los niños no tienen pasado ni futuro,
por eso gozan del presente, cosa que
rara vez
nos ocurre a nosotros.
Quien no aprende de los niños, es cierto
que no aprenderá nada de los mayores.
Los niños merecen propuestas
a la altura de su imaginación.
He llegado por fin a lo que quería
ser de mayor: un niño.
Los niños adivinan
qué personas los aman.
qué personas los aman.
Es un don natural que con
el tiempo se pierde.
el tiempo se pierde.
Cada niño que viene al mundo nos dice:
"Dios aún espera del hombre".
Lo que pongas en los primeros años
de tu vida quedará en ella hasta más
allá de la muerte.
Que ni una palabra ni una mirada
obscena manchen la casa en
donde haya un niño.
En cada niño nace la humanidad.
Los niños son la esperanza del mundo.
Donde hay niños, existe la Edad de Oro.
Es importante cuidar la infancia,
porque los niños son el futuro
de nuestro planeta y, muchas veces,
no nos acordamos de ello.
El secreto de la genialidad es conservar
el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual
quiere decir nunca perder el entusiasmo.
Aléjame de la sabiduría que no llora,
la filosofía que no ríe y la grandeza
que no se inclina ante los niños.
¿Qué sería del mundo sin niños?
Los niños son pura ternura.
Querer ser un niño es querer vivir.
Presencia la sonrisa de un niño
y tu día triste habrá acabado.
El que odia a los niños, odia el amor,
la ternura y la armonía que
desprenden con su cariño.
La palabra progreso no tiene ningún
sentido mientras haya
niños infelices.
Hay un solo niño bello en el mundo
y cada madre lo tiene.
En el fondo de nosotros mismos,
siempre tenemos la misma edad.
No todo está perdido cuando puedes
ver en el rostro de un niño,
su magnífica inocencia.
¿Dónde va un niño?
Donde lo traten con cariño.
"la ternura cura"
Lo que se aprende en la cuna
siempre dura.
Aquel que no es capaz de comunicarse
con un niño, no es capaz de
comunicarse con nadie...
Dame los primeros siete años de la
vida de un niño y te diré
lo que será el hombre del mañana.
Los niños son el reflejo de la bondad
olvidada de los adultos.
Los niños son la mayor certeza
de que Dios existe.
Los niños son las personas más sabias
del mundo, sólo que sin malicia.
Los niños tienen derecho a ser oídos
ya que son los hombres y mujeres
del mañana, ¡escúchalos!
El futuro de los niños depende
del presente que vivan.
Los bebés nacen con ojos dispuestos
a ver todo lo precioso, a abrazar todo
lo alegre y a ser queridos con
todos nuestros corazones.
Mi alegría es la mirada limpia y
llena de amor de un niño feliz.
Si todos siguiéramos siendo niños,
no habría guerras.
Tenemos que aprender de los niños…
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